sábado, 2 de julio de 2016

Aulla lobo.

Creer en las promesas. He aprendido a no creer en ellas y a pedir que no me las hagan.
Ves desfragmentarse el tiempo con sonrisas, miradas, te quieros y secretos compartidos. ¿Alguien te querrá tanto como para quedarse contigo aún cuando no deba hacerlo? ¿Alguien te leerá los viajes de Gulliver por las noches cuando estés llena de tristeza? ¿Alguien te guiará al cielo a ver las estrellas aunque esté muriendo por dentro? Nadie estará para ti y tampoco nadie pondrá tu dolor antes que el suyo, nadie se quedará a secar tus lágrimas. Estás sola ¿Acaso no lo aprendiste bien? Te lo dejaron muchas veces claro, aléjate a llorar al lugar oscuro donde nadie te vea, donde a nadie le importe voltear a ver. Donde el silencio queda corto al lado de los ruidos de la gente que sí sonríe, de aquella gente que no siente más de lo que ve.
Mírate, ¿hace cuanto tiempo que no llorabas? Nadie se quedará para ti, eres un lobo, un lobo solitario y callado. Nadie debe saber tus secretos, nadie debe saber quien eres. Muéstrales a la bestia, al demonio, al monstruo. Y aprende lobito, NADIE ESTARÁ PARA TI.
Aulla lobo, saca tu orgullo y tu coraje.